Inmenso, intenso, privado, intimo y tan personal.

Que triste todo.
Todo suena tan “cliché”, pero es tan cierto. Tan real.
Un antes y un despues.

Todo cambio.
Nada fue igual.
Solo veo dolor, culpa, pena infinita y un desinteres total y real.

Nunca habia estado tan cerca del suicidio.
Realmente no quiero vivir.
No quiero seguir consumiendo aire.
Nunca voy a poder dejar de sentirme un completo cobarde. Una real. Es una culpa que llevare a la tumba.
Es mi mayor pecado.
Me asusta no saber como pueda salir de todo esto.
Me da miedo.
Lo digo de verdad.
No sé que viene para mi, pero todo esto es tan apocaliptico.
Huelo mi fin.

El genesis de todo esto nunca volvera. Es un dolor inmenso, intenso, privado, intimo y tan personal.

Desde ese dia, cada segundo que pasa, quiero estar muerto.
Esa es mi meta del 2017. Y ya lo fue del 2016, 2015 y hasta 2014.

Me gustaria morirme y venir a ver a mis seres queridos.
Poder molestarlos,

odio respirar

Los finales de año siempre son demasiado tristes.
Siempre he sabido que la mayoría de la gente se suicida a fin de año y les encuentro la más y absoluta razón.
Me siento solo, triste y por otro lado tampoco quiero salir de ahí. Siento que me lo merezco. Que merezco todo lo que me esta pasando. Siento que me merezco como me siento. Es poco para todo lo cobarde que fui.
Muchos dirán que fue la inmadurez, pero no es eso, fui cobarde.
Es raro. Inexplicable. Sin sentido, pero me hace sentir yo.
Siempre digo lo mismo, pero de aquí a la fecha, han sido 365 – 400 días más horribles de mi vida. Ni siquiera cuando se murió mi mamá me sentí así.
Estoy encerrado en mí y en mis cosas.
Vivo en una falsa fantasía.
Yo creo que los últimos 3 meses, con suerte he visto a 3 – 4 personas.
Me da vergüenza ser tan mal amigo, pero eso soy.
Suena a resignación y quizás es lo más fácil.
No sé que hacer.
Ni el psicólogo, ni las amistades, ni las personas más cercanas saben lo mal que me siento.
Tengo miedo.
A veces sólo quisiera un abrazo, un cariño en el pelo y nada más.
No sé qué hacer y tengo miedo.
Tengo miedo de estar loco.
Demente de verdad.
Vivo en una mentira constante en donde todo está bien.
Odio el mundo y a mí. Me volví un vinagre. Un viejo de mierda. Un negativo. Un careta.